"La
situación continuará porque la visibilidad está
restringida a 1.000 metros", dijo el jefe del Servicio Meteorológico
Nacional, Nabil Kawas.
El mínimo de visibilidad para aterrizar en Toncontín
es de 3 kilómetros.
Informó
que los aeropuertos internacionales de San Pedro Sula y La Ceiba,
sobre el Atlántico, fueron también cerrados por
dos horas por el fenómeno.
"Las brisas marinas alejan rápidamente el humo, lo
que no ocurre en Tegucigalpa, donde se ha encajonado porque la
ciudad está situada en medio de montañas y colinas",
añadió.
Kawas
afirmó que "Toncontín está a 1.000 metros
sobre el nivel del mar, en cambio los otros aeropuertos hondureños
están a mismo nivel de la costa y, por eso, no son afectados
tan seriamente".
Entretanto,
centenares de pasajeros nacionales y extranjeros han comprado
boletos en autobuses o rentado automóviles para viajar
a sus destinos por Guatemala, El Salvador y Nicaragua.
"El
humo lo causan más de 450 incendios forestales,que han
destruido 5.500 hectáreas de bosques de pino en el territorio
nacional", dijo el portavoz de los bomberos Oscar Triminio.
"Trescientos de ellos han ocurrido en los lrededores de Tegucigalpa".
El
humo, que llega hasta los 10.000 pies de altura, ha aumentado
las altas temperaturas tropicales que tradicionalmente son de
27 grados centígrados en promedio en Honduras, pero que
hace un mes oscilan entre los 38 y 41.
El humo, que cubre el 90% del cielo hondureño, se disiparía
con la llegada de las lluvias en mayo.
El
fuego ha arrasado los bosques de coníferas donde está
el 30% de las fuentes de agua potable que consumen casi los dos
millones de capitalinos.
Los incendios causan pérdidas superiores a los 1.200 millones
de dólares y destruyen alrededor de 100.000 hectáreas
de bosques cada año en Honduras.
El
60% del territorio, de 112.492 kilómetros cuadrados, es
montañoso y lleno de coníferas.