Bendana-Pinel
tomó la palabra en nombre de su Gobierno, hoy jueves, durante
el debate sobre política general de la XXXIII Conferencia
General de la UNESCO, que se celebra en París.
El
representante diplomático reconoció que en Honduras
se ha incrementado la violencia, sobre todo la que afecta al segmento
de población juvenil.
Manifestó
la disposición de las autoridades hondureñas a eliminar
ese problema y agradeció los esfuerzos que lleva a cabo la
UNESCO a través de programas para la prevención de
la violencia en toda América Central.
Enumeró
algunas líneas de acción de su Gobierno, como los
pasos dados en el avance tecnológico, que ha llevado a la
instalación de redes informáticas en zonas desfavorecidas
y en cárceles, como un medio para favorecer el desarrollo
económico y la reinserción social, respectivamente.
Atribuyó
gran importancia a la buena gestión de los recursos hídricos
y subrayó las recomendaciones que en ese sentido hace la
UNESCO y pidió atención especial a los países
que tienen zonas de conflicto o acaban de superarlo en épocas
reciente.
Asimismo,
solicitó esfuerzos en la lucha contra el SIDA y expuso al
director general de la Organización, el japonés Koichiro
Matsuura, la conveniencia de continuar con la tendencia a la descentralización.
Bendana-Pinel
destacó que la UNESCO cumple ahora sesenta años con
una buena trayectoria en favor de la paz, la justicia y la dignidad,
aunque alertó sobre el hecho de que todavía esos valores
son frágiles ante elementos como la intransigencia, el contraste
entre riqueza y pobreza y el lenguaje de la confrontación
en diferentes ámbitos de actuación. EFE
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