Redacción
Proceso Digital
Tegucigalpa
- El terror que viven los hondureños en la víspera
de la fiesta estadounidense de las brujas no tiene que ver con las
tradiciones anglosajonas, aunque el ambiente de espanto y terror
no deja nada que envidiarle.
A
un mes de los comicios electorales el candidato liberal, a la presidencia,
Manuel Zelaya, reiteró las acusaciones a la policía
de estar vinculada con los criminales que cometieron una masacre
en “Chamelecón”, al norte de Honduras, la noche
del 23 de diciembre pasado, y dio paso a las declaraciones de la
Fiscalía Publica, una entidad que se había mantenido
silenciosa sobre la temática pese a su competencia.
La
fiscal de los Derechos Humanos, Aída Romero, dijo que citará
al presidenciable Manuel “Mel” Zelaya “en su momento
y confiamos en que este documentado” dijo la funcionaria.
Asimismo,
apuntó que la cita al aspirante presidencial se hará
luego “que pase el fervor político para evitar que
se tergiverse cualquier situación”.
Las
declaraciones de la fiscal Aída Romero se hicieron públicas
unas horas después de que los liberales reiteraran sus denuncias
en relación a lo acontecido en Chamelecón, donde 24
personas fueron asesinadas cuando una supuesta pandilla acribilló
a un bus del transporte público urbano.
Al
ser consultado sobre el tema, el presidente de la República,
Ricardo Maduro, dijo que la acusación formulada por Manuel
Zelaya “es temeraria” e indicó que en el esclarecimiento
y deducción de responsabilidades deben participar todos los
operadores de justicia.
Durante
una comparecencia frente a un club Rotario en la norteña
ciudad de San Pedro Sula, Manuel Zelaya dijo que “la masacre
de Chamelecón la realizó el narcotráfico con
el apoyo de la policía”.
Asimismo,
dijo que la droga circula en el atlántico hondureño
custodiada por la policía.
Ante
tales acusaciones el ministro Oscar Álvarez rechazó
los señalamientos y dijo que si existe la acción de
algún individuo en una acción delictiva se procederá
de acuerdo a la ley.
“Jamás
me prestaría a un hecho tan temerario”, sostuvo el
funcionario quien pidió al presidenciable a que presente
pruebas de de las acusaciones que formula.
En
tanto la presidenta del Consejo central Ejecutivo, Patricia Rodas,
reiteró las acusaciones del candidato de su instituto político
y dijo que los nacionalistas en el poder están haciendo una
campaña de terror con la que buscan ganar el favor del electorado.
Honduras
se apresta a una justa electoral el 27 de noviembre próximo,
en la que participarán cerca de cuatro millones de electores,
que además de elegir al próximo presidente del país,
escogerán a los 128 diputados y 298 alcaldes.
En
el proceso electoral participan el Partido Nacional en el poder,
el Partido Liberal, principal fuerza opositora; la Democracia Cristiana,
el Partido Innovación y Unidad y la Unificación Democrática,
una naciente corriente de tendencia izquierdista.
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