Aguas
Ocaña declaró hoy a la televisión local que
felicitó al líder religioso nicaragüense por
la labor que ha realizado en los últimos años en Nicaragua,
como reconocido mediador en tantos conflictos.
Agregó que con Obando y Bravo
también intercambió experiencias sobre la mejor manera
de ayudar a los más pobres del pueblo nicaragüense,
que es su objetivo, y recibió la bendición del prelado.
El ex arzobispo de Managua, por
su lado, reconoció que le ha impactado la labor que Aguas
Ocaña realiza, que se apoya en la pedagogía del amor.
"En cierto sentido ella se
parece a San Juan Bosco en la obra que realiza, ya que el santo
trabajaba por la juventud pobre y abandonada, y ella trabaja por
los niños que están abandonados", dijo el cardenal
Obando y Bravo.
"Que el Señor bendiga
su labor y nos sentimos orgullosos de tenerla aquí en Nicaragua
y tenemos la firme convicción que hará una gran labor
y que el ejemplo de ella nos va a ayudar", añadió.
Aguas Ocaña llegó
a Nicaragua el viernes pasado tras cesar como primera dama de Honduras
y asistir a la toma de posesión del nuevo presidente de este
país, Manuel Zelaya.
Ocaña, quien el jueves pasado
confirmó su separación del ahora ex presidente de
Honduras Ricardo Maduro, viajó a Nicaragua junto con sus
tres hijos hondureños adoptivos.
La ex primera dama hondureña
dijo a los periodistas que viajó a Nicaragua para instalarse
y buscar la escuela para sus hijos, y que espera volver pronto a
Honduras, país del que dijo que le ha dado muchas satisfacciones.
En Nicaragua tiene previsto trabajar
con una organización no gubernamental española en
un proyecto a favor de niños desarraigados.
Agregó que se reunirá
con Rosario Murillo, esposa del ex presidente y líder sandinista,
Daniel Ortega, con la primera dama de Nicaragua, Lila Abaunza de
Bolaños, y con líderes de los partidos en busca de
apoyo para la labor que desarrollará en Nicaragua.
Adelantó que en los próximos
dos meses definirá el proyecto que llevará a cabo
en este país.
Aguas Ocaña, natural de Brenes
(Sevilla), sur de España, contrajo marimonio con Maduro el
10 de octubre de 2002, el mismo año en que el ahora ex presidente
asumió el poder.
Según Ocaña, su relación
con Maduro es de mucho respeto, y su divorcio obedeció a
que los objetivos de uno y otro son diferentes.
En
Honduras, Ocaña impulsó diversos proyectos sociales
desde el Despacho de la Primera Dama dirigidos a niños, mujeres
y ancianos en situación de riesgo social, entre otros, por
lo que se ganó el afecto de muchos hondureños. EFE |