Transportistas protestan
por ola de violencia

   
  • Exigen al ministro de Seguridad que salga a las calles a combatir la delincuencia
13 de marzo de 2006
Redacción Proceso Digital 

Tegucigalpa - Cansados de la ola de violencia que azota la capital, trabajadores y empresarios del transporte urbano paralizaron sus labores y exigieron al ministro de seguridad, Álvaro Romero, que deje su oficina y “salga a la calle a combatir a los delincuentes que tienen en zozobra a la ciudadanía”.

Los transportistas paralizaron sus labores agobiados por la ola de violencia.


Los trabajadores del transporte paralizaron sus unidades desde las seis de la mañana en el bulevar Fuerzas Armadas a la altura de la colonia El Carrizal, al norte de la ciudad, luego del asesinato de varios de sus compañeros durante el fin de semana, lo que obligó a los usuarios a caminar para llegar a sus empleos.

En las últimas semanas la violencia se ha recrudecido en la capital hondureña, así como en otras importantes ciudades del país, pero el ministro de Seguridad asegura que todo se “debe a una situación de percepción” porque las cifras son menores a las registradas antes de que asumiera el cargo.

Los protestantes exigieron al gobierno mayor seguridad para poder trabajar y denunciaron que están cansados que los delincuentes, principalmente los pandilleros que los obligan a pagar el denominado “impuesto de guerra”, cometan sus fechorías con total impunidad y muchas veces en contubernio con los mismos policías.

“Queremos que el ministro salga de su oficina y salga a la calle a detener a los delincuentes, porque ya no aguantamos. Estamos cansados que sigan asaltándonos y matando a nuestros compañeros, sin que las autoridades hagan nada para detener a los criminales”, dijo uno de los protestantes.

Fin de semana violento
A pesar de las tibias medidas adoptadas por la Secretaría de Seguridad en los últimos días, la violencia no da tregua a los hondureños, ya que sólo el fin de semana se reportaron más de doce personas muertas por diferentes hechos violentos relacionados con la delincuencia.

Durante el fin de semana se reportó la muerte violenta de doce personas.
Entre las víctimas reportadas este fin se semana se encuentra un oficial dado de baja de la Policía Preventiva, identificado como José Timoteo Reina Gómez (38), quien fue plagiado por desconocidos y posteriormente ejecutado a balazos en la carretera de que conduce al sur del país, a unos 60 kilómetros de la capital.

Reina Gómez desapareció el sábado a las siete de la mañana, tras salir de su vivienda en una camioneta color negro. En ese momento era acompañado por su guardaespaldas Luis Alfonso Cruz Romero, cuyo paradero hasta hoy era desconocido.

También se reportó la muerte del motorista Santos Javier Reyes, quien laboraba en una unidad del transporte urbano que cubre la ruta Carrizal- Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH). Reyes fue asaltado por cuatro delincuentes que lo obligaron a entregar el dinero de su trabajo frente a los asustados pasajeros.

Además de estas muertes, las autoridades reportaron los asesinatos de otras diez personas, todos en hechos violentos.

El director de Medicina Forense, Amilcar Rodas, reveló que en la mayoría de los asesinatos registrados en los últimos meses, los homicidas utilizaron armas 9 milímetros, 38, 40 y también AK-47, cuya tenencia y uso está prohibido por los cuerpos de seguridad del estado.

Otro elemento importante es que en los análisis realizados a muchas de las víctimas, se establece la presencia, cada vez más frecuente, de de diferente tipo de drogas como Marihuana y Cocaína. Antes solo se encontraban residuos de alcohol en los cadáveres y los agresores, pero ahora hay otros estupefacientes de por medio.