Líder y fundador del MRTA condenado a 32 años de cárcel en Perú
   

21 de marzo de 2006

Lima - El líder y fundador del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA), Víctor Polay Campos, fue condenado hoy a 32 años de prisión por un tribunal peruano que lo encontró culpable del delito de terrorismo.

Junto a Polay fueron sentenciados los principales dirigentes del grupo armado, que durante los últimos quince meses fueron sometidos a un proceso civil en cumplimiento de una orden del Tribunal Constitucional.

Víctor Polay Campos.

Polay, que permanece preso desde 1992, abandonará la prisión el 3 de enero de 2023, según precisó la sala penal que dictó la sentencia en la Base Naval del Callao. Otro de los cabecillas del MRTA, Miguel Rincón Rincón, también recibió una sentencia a 32 años de cárcel, mientras que la dirigente Lucero Cumpa fue condenada a 28 años de prisión.

Los dirigentes Péter Cárdenas y Alberto Galvez Olaechea recibieron 25 y 23 años de cárcel, respectivamente.

Otros seis miembros del grupo armado también fueron condenados a penas de entre 15 y 20 años, mientras que dos fueron absueltos.

El Ministerio Público había solicitado para Polay la cadena perpetua y 25 años de reclusión para los dirigentes procesados junto a él.

La Sala Penal Nacional, conformada por los vocales superiores, Pablo Talavera, David Loli Bonilla y Jimena Cayo, determinó que los líderes del MRTA deberán pagar en total una reparación civil de 50 millones de soles (unos 15 millones de dólares).

La sentencia precisó, además, que tanto Polay como sus seguidores deberán dejar la prisión de la Base Naval y pasarán a un penal bajo control del Instituto Nacional Penitenciario.

La situación judicial de Polay generó la semana pasada un pronunciamiento de políticos de izquierda, intelectuales y artistas, que pidieron una "sentencia justa" para el fundador del MRTA.

El pronunciamiento llevó la firma de decenas de personajes públicos, entre los que destacaron los candidatos a la presidencia Javier Diez Canseco, del Partido Socialista; Alberto Moreno, del Movimiento Nueva Izquierda, y Ulises Humala, del partido Avanza País.

Los suscriptores afirmaron que Polay fue sometido a condiciones infrahumanas en los años que lleva recluido en la Base Naval del Callao y consideró su "reincorporación" a la vida política del país "fundamental para el desarrollo de la democracia en el Perú".

El jefe histórico del MRTA fue condenado en 1993 a cadena perpetua en un juicio sumario dirigido por un tribunal militar, que después fue anulado por el Tribunal Constitucional.

El MRTA ha sido señalado por la Comisión de la Verdad y Reconciliación como responsable del 1,5 por ciento de las más de 69.000 víctimas que causó la violencia política en Perú entre 1980 y 2000.

El grupo subversivo, que inició sus acciones en 1984, dirigió sus ataques, principalmente, contra autoridades políticas y militares, así como a instituciones y comercios vinculados a Estados Unidos.

Sin embargo, algunas de sus acciones más sanguinarias fueron los secuestros de empresarios, algunos de los cuales murieron de hambre en las denominadas "cárceles del pueblo".

Polay afirmó durante el desarrollo del juicio que desea reincorporarse a la actividad democrática e incluso dejó abierta la posibilidad de presentar su candidatura presidencial.

El Procurador Antiterrorista de Perú, Guillermo Cabala, remarcó, sin embargo, que el dirigente subversivo quiso "hacer creer que es un perseguido o preso político, que lo que hizo no fue terrorismo sino un accionar revolucionario de tipo político".

Polay, que hoy presentó una apelación contra la sentencia, lamentó el sufrimiento provocado a su familia con sus acciones. EFE