Al menos 27 muertos dejan tormentas en EEUU
   

03 de abril de 2006

Washington - Al menos 27 personas han muerto como resultado de una ola de tornados y vendavales que azotaron la zona central y oriental de Estados Unidos en las últimas 48 horas, se informó hoy oficialmente.


Las tormentas se extendieron en la noche del lunes a la zona atlántica y se hicieron sentir con intensas lluvias y relámpagos en la capital estadounidense y en los estados de Maryland y Virginia, mientras nevaba en el extremo nororiental del país, informó el Servicio Meteorológico Nacional.

La mayor fuerza de las tormentas se registró en la noche del domingo en una zona rural del estado de Tennessee, donde las autoridades informaron de 23 muertes por los tornados.

Entre ellas incluyeron la de un bebé y sus abuelos, que lo cuidaban. A pocos metros del lugar, las autoridades hallaron los cadáveres de una pareja joven y de sus dos hijos, de 5 y 3 años, señalaron.

Las tormentas, que incluyeron al menos 63 tornados, también azotaron con intensas granizadas a los estados de Iowa, Kentucky, Arkansas, Misuri, Ohio, Illinois e Indiana, señalaron fuentes de los servicios meteorológicos.

El gobernador de Tennessee, Phil Bredesen, pidió al presidente de EEUU, George W. Bush, que declare zona de desastre a los condados de Dyer y Gibson, donde al menos 1.200 casas resultaron dañadas por una de las tormentas.

"Nuestra principal prioridad en estos momentos es acudir en ayuda de quienes han resultado afectados para que se recuperen y retorne la normalidad", dijo el gobernador.

Las fuentes meteorológicas indicaron que las tormentas fueron provocadas por un frente frío procedente de la costa occidental que embistió una masa cálida y húmeda en el centro del país.

El Servicio Nacional de Meteorología informó de que "numerosas casas" también resultaron destrozadas en la ciudad de Hopkinsville, al suroeste de Kentucky, y que se registraron daños materiales en automóviles y edificios en la localidad de Lewisburg.

La Cruz Roja se ha desplegado en la zona para ayudar a los habitantes que han abandonado a sus viviendas en busca de refugio. EFE