Dos muertos y destrucción
dejan inundaciones

   
  • En algunas comunidades, los pobladores perdieron todos sus cultivos de granos básicos

26 de junio de 2006
Redacción Proceso Digital   

San Pedro Sula - Dos muertos, centenares de familias damnificadas y daños a cultivos, es el resultado de las inundaciones que azotan la región atlántica de Honduras y especialmente el Valle de Sula.

Los muertos fueron identificados como: José Carlos Membreño de 24 años, quien murió ahogado en el sector de la montañuela Choloma y Eugenia Orellana Vásquez de 65 años quien falleció al intentar cruzar un quinel en ese mismo sector.

Frente a esta situación Autoridades de contingencias decretaron alerta amarilla para las próximas 24 horas, debido a los niveles del río Ulúa que indican crecimiento superior a los niveles normales hasta en 1.25 metros, especialmente en la zona de Santa Bárbara.

Las comunidades más afectados hasta el momento son Santa Cruz de Yojoa, Potrerillos y Choloma, pero también hay daños en los sectores de Pimienta, San Manuel, La Lima, Santa Rita y El Progreso y de igual forma en comunidades de Atlántida.

Más de un centenar de familias afectadas, varias comunidades incomunicadas y miles de hectáreas de cultivos de granos básicos y palma africana anegados, es el panorama desolador que han dejado las fuertes lluvias que azotan el Valle de Sula, informó hoy la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco).

El subcomisionado regional de Copeco, Carlos González, informó que a raíz de las crecidas de los ríos, hasta la noche del lunes, se registraban más de diez comunidades incomunicadas y alrededor de 139 familias evacuadas en el municipio de Santa Cruz de Yojoa, jurisdicción de Cortés.

Dijo que el problema en este sector se deriva del hecho que los poblados se encuentran en la confluencia de los ríos Ulúa y Humuya y el desbordamiento de ambos afluentes ha imposibilitado que los habitantes pueden desplazarse hacia lugares más seguros u otras poblaciones aledañas.

Por otro lado, detalló que en el municipio de Potrerillos se decretó la alerta roja a raíz de la situación imperante en la zona, en donde, hasta anoche, se tenían reportes de alrededor de 12 familias evacuadas y más del 80 por ciento de los cultivos de granos básicos perdidos bajo las aguas.

Dijo que en esta zona el gobierno desplazó maquinaria y personal para proceder a la reparación de los bordos de contención, pero debido al desbordamiento del río Chamelecón, ha sido imposible hacer los trabajos correspondientes. Pero se retomarán una vez que las aguas vuelvan a su cauce.

Asimismo, el funcionario indicó que se encuentran en alerta permanente, ya que temen que los bordos en el sector de los Bajos de Choloma no soporten le embestida del río Ulúa, que producto de los fuertes aguaceros que han caído en la zona, creció cuatro metros arriba de lo normal.

Daños millonarios
Por su lado, los productores de la empresa campesina La Virtud del sector de Ticamaya, Cortés, informaron que solo en esta zona se contabilizaban unas 400 manzanas de cultivos de granos básicos anegados, sin contar otras 1,000 manzanas de sembradíos que tenían cultivadas otras empresas campesinas del sector.

Las pérdidas económicas son incalculables, por lo que los labriegos elevaron un llamado de socorro a las autoridades municipales y nacionales para que se les proporcione asistencia alimentaria, pues la totalidad de la producción de maíz y fríjol se perdió bajo las crecidas de los ríos.

Asistencia sanitaria
Por su lado, el jefe regional de Salud, Mauricio Castellanos, indicó que se están adoptando las medidas sanitarias pertinentes para evitar que las enfermedades infecciosas puedan afectar a las decenas de familias que han sido evacuadas en la región, particularmente a los niños.

Castellanos indicó que solo en el sector de Potrerillos hay más de 16 mil personas que no tienen agua potable en este momento, por lo que este martes se enviarán varios carros cisternas para aprovisionarlos del vital líquido

Asimismo, en las áreas afectadas y en los albergues se harán operativos de fumigación a fin de eliminar las plagas de ratones, mosquitos y zancudos y de esta forma controlar el aparecimiento de enfermedades transmisibles como el dengue clásico y hemorrágico o la mortal leptospirosis

 
Enviar
Imprimir
Comentar


 

 
Todos los derechos reservados PROCESO.HN ® Copyright 2005