En
un primer momento, fuentes del Ministerio de Interior iraquí
habían afirmado que el vehículo era un coche-bomba
que estaba aparcado y que fue detonado por control remoto cerca
del mercado "Al
Suq al Awal".
El subsecretario del Ministerio de Sanidad, Sabah al Huseini,
afirmó al canal de televisión iraquí, Al
Iraquiya, que el recuento de las víctimas mortales ha
aumentado después de que murieran cuatro
personas que estaban hospitalizadas.
Según la fuente, los hospitales de Al Imám Ali
y de Al Sadr han recibido 66 muertos y 98 heridos, de los que
13 siguen en estado grave.
El responsable sanitario describió la situación
en la que se encuentran los centro médicos donde están
ingresadas las víctimas como "catastrófica",
e instó al gobierno del primer ministro, Nuri al Maliki,
a que se destine un presupuesto extraordinario para este tipo
de sucesos.
La cadena de televisión mostró imágenes
del lugar de la explosión en las que se podían
ver ambulancias y ciudadanos del barrio que intentaban desesperadamente
trasladar los cuerpos destrozados de las víctimas.
Ciudad Sadr es un feudo de las milicias de Al Mahdi, creadas
por el clérigo rebelde chií Muqtada al Sadr, uno
de los más radicales opositores de la ocupación
encabezada por el ejército estadounidense.
Los nuevos actos de violencia coinciden con el inicio de una
visita oficial del primer ministro iraquí, Nuri al Maliki,
a Arabia Saudí, Kuwait y los Emiratos Arabes Unidos con
el objetivo de buscar apoyo para el "plan de reconciliación"
presentado al Parlamento el pasado 28 de junio.
La iniciativa incluye como uno de sus principales objetivos
acabar con la violencia en el país y convencer a los
grupos zuñes para que participen en el proceso político.
EFE