Las decepciones del mundial
De Ronaldinho, Roberto Carlos, Rooney, Raúl y otros demonios

   

08 de julio de 2006

Berlín - Ronaldinho Gaúcho, Roberto Carlos, Wayne Rooney y Raúl González encabezan la lista nada honrosa de figuras que fueron noticia en el Mundial de Alemania por su decepcionante fútbol.

Ronaldinho

Así como la selección brasileña fracasó con su propuesta del "cuadrado mágico", el divorcio del balón y de las porterías de Ronaldinho, Roberto Carlos, Rooney y Raúl durante el torneo podría reunirlos en la sociedad del "cuarteto trágico".

Ronaldo de Assis Moreira, el mejor futbolista del mundo, pasó prácticamente inadvertido durante los cinco partidos que jugó Brasil.

El jugador del Barcelona no marcó goles y su última presentación destacada vestido de verde y amarillo se remonta al partido de cuartos de final contra Inglaterra, en el Mundial de 2002, que él se encargó de resolver.

Su compatriota Roberto Carlos da Silva, quien hasta 2006 parecía tener escriturado el puesto de lateral zurdo, tuvo un final triste ante Francia, todo por arreglar sus medias en el momento en que Zinedine Zidane lanzaba un centro que su presa, Thierry Henry, convirtió en gol

Wayne Rooney

El inglés Rooney, precoz e impetuoso, no pagó las expectativas que a los veinte años genera su afinado olfato goleador. En el momento que más lo necesitaba su equipo perdió los papeles y resultó expulsado durante el partido de cuartos de final ante Portugal por pisar la parte pubiana de Ricardo Carvalho.

Rooney volvió a ser noticia después de la eliminación al difundir la prensa inglesa que el delantero del Manchester United estaba furioso y dispuesto a "partir por la mitad" a su compañero de equipo, el portugués Cristiano Ronaldo, que supuestamente fue quien pidió al árbitro que le expulsara.

El "Chico malo" matizó el asunto en una nota de prensa: "No guardo ningún resentimiento hacia Ronaldo, sólo estoy decepcionado por el hecho de que interviniera. Pero creo que tengo que recordar que en esa particular ocasión no éramos compañeros".

Raúl González, el máximo cañonero español, llegó con su físico minado, vio fracciones de partido desde el banco y cuando pisó la cancha se le vio lejos del área, inapetente de gol.

No obstante, el ariete del Real Madrid desatascó con su gol un partido que ganaba Túnez, en la segunda jornada del Grupo H, y que terminó con una cómoda victoria española por 3-1.

El Mundial de Alemania también debe pasar al olvido para una selección, la brasileña, que llegó a ser la favorita de todas; y un club, el Barcelona, que nutrió a seis selecciones con diez de sus jugadores.

Además de Ronaldinho Gaúcho, ninguno de los otros barcelonistas logró empujar a sus países a la final del campeonato entre Francia e Italia.

El centrocampista Deco, con altibajos físicos, cayó con Portugal en el choque de semifinales con Francia.

Lionel Messi tuvo algunos minutos como titular, pocos, según muchos analistas, y nada pudo hacer para evitar la caída de Argentina ante Alemania en los cuartos de final.

El defensa Rafael Márquez se fue con México después de la fase de octavos al caer con Argentina.

El ariete Henrik Larrson, principal esperanza de los suecos, vino, vio y perdió, pues apenas marcó un gol, contra Inglaterra, y tuvo la mala fortuna de desperdiciar un penalti cuando los anfitriones ganaban por 2-0 en octavos de final.

Así como Raúl perdió, la misma suerte correspondió a sus compatriotas Andrés Iniesta, Carlos Puyol y Xavi Hernández.

Los holandeses Mark Van Boomel y Giovanni Von Bronckhost tampoco pudieron a ayudar a superar la muralla portuguesa en los octavos de final. EFE