El
pontífice envió un telegrama a las autoridades civiles
y religiosas de la India para condenar los ataques contra siete
trenes y expresar su "cercanía espiritual" con
las víctimas y sus familias.
Agregó
que sus oraciones están con "todos aquellos que están
sufriendo, en particular, con los numerosos heridos" para
que Dios les conceda "fuerza, consuelo y apoyo".
El
pontífice, que se encuentra de vacaciones en el Valle d'Aosta
(norte de Italia), envió su mensaje por medio del secretario
de Estado del Vaticano, Angelo Sodano.
Siete
bombas casi simultáneas explotaron ayer en vagones de primera
clase de trenes suburbanos abarrotados de trabajadores que volvían
a sus casas a las afueras de Bombay, en la hora punta de la tarde,
al concluir su jornada laboral.
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De
momento no se han realizado detenciones por estos ataques,
que causaron al menos 183 muertos y 714 heridos, según
las últimas cifras proporcionadas por el Gobierno
indio. |
La
India "no se arrodillará"
Por su lado, el primer ministro indio, Manmohan Singh, advirtió
hoy de que su país "no se arrodillará"
ante el terrorismo y alabó la forma en que Bombay regresó
a la normalidad tras los atentados de ayer, que causaron cerca
de 200 muertos al estallar siete bombas en otros tantos trenes
y estaciones.
En
un mensaje televisado a la nación, el primero tras los
atentados, Singh no dio indicios sobre la posible autoría
de esos actos y, en tono institucional, agradeció la reacción
del pueblo de Bombay (oeste de la India) y Srinagar, capital de
la Cachemira india, donde ayer también murieron ocho personas
por la violencia. EFE