El
barril de Brent para entrega en agosto cotizó a 78,03 dólares
a 06:56 GMT, lo que supone un incremento de 1,34 dólares
con respecto al cierre de la sesión anterior en el Intercontinental
Exchange Futures (ICE).
El petróleo del Mar del Norte pulverizó de esa manera
el máximo histórico alcanzado el jueves, cuando
llegó a pagarse a 76,95 dólares.
El Brent subió a esos niveles después de que los
contratos de futuros del crudo Intermedio de Texas para entrega
en agosto registraran este jueves un nuevo máximo histórico
al tocar los 76,80 dólares.
El repunte del precio del crudo se debe, según los analistas,
al aumento de la tensión en Oriente Próximo, donde
las escaladas de ataques cruzados entre Israel y el Líbano
mantiene en vilo a la comunidad internacional.
El Gobierno libanés pidió este jueves al Consejo
de Seguridad de la ONU que emita una resolución "firme
e inmediata" para que se establezca un alto al fuego y pida
que Israel cese sus acciones militares contra el Líbano.
Según Mohammed Ali Zeimi, analista del Centro de Estudios
de Energía Global londinense, los mercados temen que los
ataques israelíes contra sus vecinos árabes provoquen
una reacción en otros países musulmanes, como el
propio Irán, y el conflicto se extienda a la toda la región,
lo que podría afectar al suministro de crudo.
No puede descartarse, señaló el experto, que la
organización terrorista Al Qaeda se vengue por los ataques
y "pueda cometer atentados contra infraestructuras en países
como Arabia Saudí", aliado de EEUU y principal productor
de petróleo de la zona.
Al conflicto entre Israel y el Líbano, se suma la crisis
de Irán (cuatro productor mundial de petróleo) por
su polémico programa nuclear, después de que las
potencias del Consejo de Seguridad de la ONU hayan decidido remitir
a ese organismo el contencioso.