En
declaraciones a la prensa que acompaña al presidente de
EEUU, George W. Bush, en la cumbre del G8 que se desarrolla en
San Petersburgo, Rice aseguró que EEUU se encuentra "profundamente
preocupado" por la pérdida de vidas y espera que Israel
"tenga presentes las consecuencias de sus actos y ejerza
la moderación, para no hacer daño a víctimas
o infraestructura civiles".
Pero la manera de solucionar el problema, según la secretaria
de Estado, no es un alto el fuego declarado de manera apresurada,
sino que debe lograrse un cese de la violencia que "ataje
la raíz del problema".
De otro modo, afirmó, los terroristas asumirían
que perpetrar acciones que representan un grave asalto contra
el proceso de paz de Oriente Medio no les va a acarrear consecuencias
graves.
Para resolver la crisis, aseguró, es necesario apoyar a
las fuerzas pacíficas en la región, como el presidente
palestino Mahmud Abás y el primer ministro libanés,
desarmar a los extremistas y "poner en su lugar a moderados".
El instrumento clave para lograrlo es, aseguró, la puesta
en práctica de la resolución 1.559 de la ONU y la
Hoja de Ruta, cuya aplicación se ve impedida por "los
extremistas en Hamas, Hizbulá, y los apoyos que tienen
en Siria e Irán".
La resolución 1.559, aprobada en 2004, reclama, entre otras
cosas, que todas las milicias en Líbano depongan las armas,
incluida la chií Hizbulá, y que Siria abandone su
presencia en el país vecino.
Los países representados en el G8 -EEUU, Canadá,
Rusia, Japón, Reino Unido, Italia, Francia y Alemania-
debaten esta tarde en su segunda sesión de trabajo la situación
en Oriente Medio, para tratar de llegar a una resolución
de consenso.
EEUU se ha declarado esperanzado de conseguir una resolución
que condene a Hizbulá y proclame la necesidad de poner
en práctica la resolución 1.559 tras la serie de
reuniones bilaterales mantenidas hasta el momento por el presidente
George W. Bush.
Bush se reunió hoy con el primer ministro británico,
Tony Blair, y el presidente francés, Jacques Chirac, mientras
que el viernes lo hizo con el anfitrión de la cumbre, el
jefe de Estado ruso, Vladímir Putin.
En sus declaraciones tras la reunión de hoy con Bush, Chirac
afirmó que "compartimos los mismos puntos de vista
sobre los temas que están en juego en Oriente Medio".
"Estoy
plenamente de acuerdo con los estadounidenses en la necesidad
de que la milicia libanesa chií Hizbulá libere a
los dos soldados israelíes que secuestró hace cuatro
días y ponga fin a sus ataques de mortero contra territorio
israelí", afirmó Chirac, quien también
abogó por la aplicación de la resolución
1.559. EFE