Dijo que ese tipo de medidas establece excepciones, en este caso
particular para los maestros, lo cual es contraproducente con
la institucionalidad jurídica, dijo el defensor de los
derechos humanos.
“Nos preocupa que la institucionalidad jurídica del
Estado queda cuestionada y es un mal mensaje para los inversionistas
y para los que vivimos en el país”, advirtió
Según Custodio, pareciera que se ha aumentado el número
de diputados, porque ahora, además de los 128, los que
protestan logran que se reformen las leyes a su gusto.
“Es cierto que hay que respetar lo que está en la
Constitución pero ¿hasta dónde es posible
que el Estado hondureño pueda pagar esos privilegios?”
dijo Custodio, en referencia al Estatuto del Docente, del Médico
Empleado, del Microbiólogo y el de los abogados.
Hizo un llamado a los maestros para que no exijan lo que no se
les puede pagar y al gobierno para que analicen lo actuado hasta
ahora, porque si se legisló en forma errónea al
dar privilegios que el Estado hondureño no tiene como pagarlos,
lo mejor es hacer una reconsideración.
El Comisionado ha recomendado a los maestros y al gobierno mantener
la cordura y el diálogo, evitando amenazas, presiones y
acciones innecesarias y contraproducentes que pongan en peligro
la gobernabilidad en el país.
La Ley de Reordenamiento del Sistema Retributivo del Gobierno
Central, que fue publicada en el Diario La Gaceta, el 12 de enero
de 2004, derogó los beneficios del Estatuto del Docente
pero elevó el salario base del maestro a 5214 lempiras
mensuales y dispuso que a partir del 2007 todo aumento se calculara
en base a la inflación anual.