Los
huidos, encarcelados por violación, amenazas y secuestro,
estaban recluidos en el módulo Escorpión, considerado
por las autoridades como uno de los sitios de mayor seguridad
dentro de la cárcel, situada a 30 kilómetros al
norte de Tegucigalpa.
El
ministro hondureño de Seguridad, Alvaro Romero, dijo a
los periodistas que investigan a los cuatro guardias que estaban
encargados de la seguridad del recinto, "porque creemos que
ellos fueron sobornados para poder abrir las puertas de este centro".
"Escorpio
es la zona de más alta seguridad en la cárcel y
creemos que alguien de la Policía está inmiscuido
en la fuga de ellos", añadió el alto funcionario.
En
junio pasado, cuatro reos que cumplían condena por narcotráfico,
uno de ellos también implicado en la muerte de un hijo
del ex presidente Ricardo Maduro en 1997, se fugaron del mismo
centro carcelario.
Según
estadísticas del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos
(CONADEH), 436 reos se fugaron de las cárceles de Honduras
entre 1999 y el 2004.
El
organismo considera además que las cárceles hondureñas
"no obedecen a una verdadera política criminal del
Estado" y que la policía de este país "es
corrupta en todas sus ramas y hay una total inseguridad".
EFE