Al menos un muerto por erupción volcán Tungurahua en Ecuador

   

17 de julio de 2006

Quito - La repentina reactivación del volcán Tungurahua, en el centro andino de Ecuador, ha causado hoy la muerte de al menos una persona, la desaparición de otras cuatro y ha dejado un número indeterminado de heridos.


El alcalde de la ciudad de Penipe, Juan Salazar, informó de que recuperaron el cadáver de un hombre de 53 años que resultó calcinado por los flujos piroclásticos y dijo que al menos cinco ecuatorianos ingresaron en casas de salud con diversos grados de quemaduras.

Con base en testimonio habitantes del lugar, Salazar dijo a Efe que "se presume que están bajo los escombros" otras cuatro personas del poblado de Palitahua, a los pies del volcán Tungurahua, de 5.029 metros sobre el nivel del mar.

"Sabemos por los familiares que no avanzaron a salir y que presumiblemente les taparon los lahares, dijo Salazar.

Agregó, además, que de las cincuenta personas que quedaron atrapadas desde anoche en los flancos altos del volcán, se ha logrado evacuar a 43.

Asimismo, añadió que en la madrugada logró evacuar a unas 3.000 personas hasta Penipe, situada cerca del volcán.

El director del Instituto Geofísico, Hugo Yepes, dijo hoy a Efe que le "preocupa" la abrupta calma en la que se encuentra el volcán tras haber registrado a la medianoche la mayor explosión de los últimos tiempos.

Recordó que en la erupción de julio pasado, hubo una fuerte erupción el día 14, pero luego hubo cañonazos y detonaciones que permitieron liberar la energía, "pero ahora lo que vemos es que se ha cerrado la válvula que permitía la salida del material magmático, de manera casi abrupta, habiendo únicamente unos penachos de ceniza y algo de gases y vapor, que está a una altura de seis kilómetros".

"A partir de las 03.00 hora local (08.00 GMT) el volcán ha mostrado una calma bastante intensa. Su actividad ha sido detenida casi abruptamente", lo que podría significar que está acumulando energía, dijo Yepes.

La explosión de anoche formó un hongo de ceniza que cubrió un diámetro de 280 kilómetros, por lo que calcula que cubrió una buena parte del centro del territorio ecuatoriano.

La ceniza se desplaza alrededor de la zona comprendida entre Bahía de Caráquez (provincia de Manabí) y la península de Santa Elena (provincia del Guayas).

Yepes añadió que la erupción "produjo no sólo flujos piroclásticos importantísimos, sino una columna de material incandescente (lava) que superó los ocho kilómetros de altura, sobre lo cual recién empezaba la nube de ceniza que superó los 30 kilómetros de altura".

"Si es que la erupción de julio tenía un estimado de unos 7 u 8 millones de metros cúbicos (de material volcánico), creemos que en ésta estaremos, sin problema, multiplicando por diez, al menos, los productos que han salido", subrayó.

Para Yepes, la situación actual es "un desastre nacional" y señaló que los piroclastos han formado una represa que ha contenido aproximadamente 2,5 millones de metros cúbicos de agua en el río Chambo, lo que podría afectar a la central hidroeléctrica de Agoyán.

El presidente de Ecuador, Alfredo Palacio, ha anunciado su visita a las zonas afectadas para estudiar "in situ" la situación y adoptar acciones para ayudar a los pobladores cuyas casas y cultivos han quedado bajo la ceniza.

En varios poblados ha caído ceniza y en las zonas cercanas al volcán se ha reportado, además, la caída de cascajo, algunos de cuyos pedazos son del tamaño de una pelota de golf.

Miles de hectáreas de cultivos están bajo la ceniza y los techos de casas, así como ramas de árboles han cedido al peso del material volcánico, según comprobó Efe en el sitio.

Las poblaciones más afectadas son Bilbao, Chontapamba y Chacauco, que lucen completamente cubiertas por capas de al menos cinco centímetros de ceniza.

Las autoridades aeronáuticas han suspendido los vuelos entre las ciudades de Quito y Guayaquil por precaución ante el peligro que representa la ceniza para las turbinas de los aviones. EFE