El
Comisionado Nacional de los Derechos Humanos de Honduras (CONADEH)
pidió, por su parte, declarar al Sida "enemigo público
número uno" de la sociedad hondureña.
A la marcha de conmemoración del "Día Mundial
de Lucha contra el Sida" se unió la ministra de Salud,
Yeny Meza, y la hija del presidente de Honduras, Manuel Zelaya,
Xiomara Hortencia Zelaya, entre otras personalidades.
El cantautor nacional Guillermo Anderson cerró el acto
con un concierto al aire libre, que se celebró en las inmediaciones
del Estadio Nacional de Tegucigalpa.
"Estoy aquí porque la dimensión de la epidemia
es grave y uno no puede más que sumarse a apoyar una causa
como ésta, y llamar la atención de nuestros gobernantes,
decirles esto es serio, que no es una cosa que está lejos
de nosotros", declaró Anderson a los periodistas.
Dijo que de mantenerse las tendencias "nos vamos a convertir,
como hay muchos lugares en Africa, donde solo hay gente mayor
cuidando huérfanos".
La coordinadora de Fundación Amor, Norma Murillo, dijo,
por su parte, que la caminata tuvo como propósito apoyar
a las personas infectadas con la enfermedad y pedir un alto a
la discriminación de que son víctimas en diferentes
campos.
Pidió el apoyo oficial y de la población para las
instituciones públicas y privadas que trabajan en la prevención
y atención de las personas que sufren la enfermedad.
La presidenta del Foro Nacional del VIH/SIDA, Xiomara Bú,
advirtió que en el país existen grupos poblaciones.
Según
registros oficiales, el Sida ha afectado a por lo menos 23.111
hondureños y ha causado la muerte de al menos 7.500 personas
desde su aparición en la década de los 80 del siglo
pasado, a la fecha.
Las autoridades estiman que existe un subregistro de casos de
entre el 30 y el 50 por ciento, por lo que presumen que el número
de infectados supera las 60.000 personas.
Según estas cifras, Honduras registra el mayor número
de casos en la región centroamericana Un informe de la
ONU estima además que el sida es ya la primera causa de
mortalidad entre las mujeres hondureñas.