Rey de España aboga por un futuro próspero y estable para centroamericanos

   
04 de diciembre de 2006

Madrid - El rey de España destacó hoy ante el presidente de Honduras, Jose Manuel Zelaya, la necesidad de que Centroamérica avance en el proceso de integración para afrontar "con éxito" los retos de la globalización y ofrecer a sus habitantes "un futuro próspero y estable".

Honduras, según Juan Carlos I, debe seguir siendo "motor" de dicha integración, porque ello, dijo, contribuirá a la consolidación de su desarrollo económico y social y a una mayor estabilidad.


El Rey ofreció un almuerzo al presidente hondureño, de visita oficial en España, y a su esposa Xiomara, al que asistieron el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y sus ministros de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, e Industria, Turismo y Comercio, Joan Clos, junto a una representación empresarial con intereses en el país centroamericano.

Entre la treintena de invitados se encontraban también la presidenta de la región de Madrid, Esperanza Aguirre; el alcalde de la capital, Alberto Ruiz Gallardón, y la secretaria de Estado para Iberoamérica, Trinidad Jiménez.

En su discurso, el rey Juan Carlos aseguró que España ha apoyado, y seguirá haciéndolo, los trabajos dirigidos a lograr un Acuerdo de Asociación entre la Unión Europea y Centroamérica, que traerá, dijo, beneficios en ambas orillas atlánticas.

Zelaya recordó el "especial cariño" que sienten los hondureños "por esta monarquía" y por el "liderazgo" que el presidente Zapatero ejerce en la escena mundial. "El paso que marca España en el concierto del mundo -dijo- es el que quiere seguir Latinoamérica para fortalecer la democracia".

De democracia habló antes el monarca español, quien elogió el "esfuerzo" hecho por Honduras en el último cuarto de siglo para lograr la "estabilidad democrática", fortalecer sus instituciones y mejorar su eficacia.

Don Juan Carlos citó expresamente la reciente aprobación por el Congreso Nacional hondureño de la Ley de Transparencia, "un paso importante que contribuirá, sin duda, -recalcó- a fomentar un clima de seguridad jurídica y de confianza con el que Honduras podrá desarrollar su gran potencial turístico y atraer un mayor flujo de capital exterior, incluido el que procede de España".

A la estabilidad política se suman, agregó, unas previsiones económicas "optimistas", con un alto crecimiento, baja inflación, unas amplias reservas internacionales y el incremento de las remesas de los emigrantes.

Todo ello, remarcó, pronostica unas "perspectivas prometedoras" para el desarrollo de Honduras, combinadas con las medidas impulsadas por el presidente Zelaya para combatir las desigualdades sociales, la llamada Estrategia de Reducción de la Pobreza.

"Hemos avanzado en el proceso democrático y económico. Ahora es necesario profundizar en lo social", apuntó el presidente hondureño, que antes del almuerzo se reunió con el rey Juan Carlos en su despacho del Palacio de La Zarzuela.

En opinión de José Manuel Zelaya, Latinoamérica vive cambios "positivos", para avanzar en lo político, hacia democracias más fuertes, y en lo social, para combatir la pobreza. Proceso en el que España, insistió, debe ejercer el liderazgo.

El Rey habló de España y de los últimos veinticinco años de su historia, "uno de los periodos -dijo- de mayor estabilidad y progreso en libertad", logrado gracias a una Constitución "fruto de un consenso sin precedentes".

Ello ha permitido a los españoles "hacer efectiva su vocación de solidaridad" y dedicar a la cooperación internacional para el desarrollo unos recursos que hoy están cercanos al 0,4% del PIB.

Honduras es país prioritario para la cooperación española, circunstancia que está en el origen del "importante esfuerzo" hecho para condonar parte de la deuda que el país centroamericano tiene contraída con España.

El presidente hondureño ha viajado a España acompañado por sus ministros de Exteriores y de la Presidencia de la República. EFE

 
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