El ministro
hondureño de Agricultura y Ganadería, Héctor
Hernández, dijo a la prensa que la importación se
hará en base a un convenio oficial de granos básicos.
Agregó
que en los próximos días se firmará la autorización
para las importaciones de ese producto, lo que garantizará
la reserva de la agro-industria de concentrados, que actualmente
sólo cuenta con unos 600.000 sacos en sus bodegas.
Hernández
subrayó que el Gobierno quiere prevenir una posible escasez
que podría darse durante este año, lo que también
supone liberar la presión que existe sobre el maíz
blanco, el que consume la mayoría de los hondureños.
El titular
de Agricultura y Ganadería señaló que por
ahora no hace falta importar maíz blanco, porque la producción
nacional es suficiente.
Según
el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), la producción
de maíz blanco en 2006 fue de unos 10,7 millones de sacos
(unas 535.000 toneladas).
La demanda
de maíz amarillo de Honduras es casi igual a la del blanco,
según Hernández, quien además indicó
que el grano ha sufrido un alza en el mercado internacional en
los últimos meses.
El alto funcionario
dijo que otros países como Estados Unidos, Argentina, Brasil
y México, igual están teniendo problemas con su
producción de maíz, en vista de que la industria
también lo está utilizando para elaborar combustible.
El maíz
forma parte de la dieta básica de los hondureños,
que lo consumen principalmente en tortillas, que vienen siendo
el sustituto del pan entre los pobres. EFE