Tegucigalpa
– El Partido Nacional, primera fuerza de oposición
política en Honduras, hizo hoy fuertes críticas
a la administración del presidente, Manuel Zelaya, a quien
calificó como “un mandatario inefectivo” que
en su primer año de Gobierno “ha incumplido sus promesas
electorales”.
Los señalamientos están contenidos en un extenso
documento en el cual los nacionalistas, que gobernaron el país
en el período 2002-2006, hacen una evaluación del
primer año de la administración de Zelaya.
En su análisis, el Partido Nacional señala que el
presidente Zelaya, al termino de su primer año de Gobierno,
“ha sido un mandatario inefectivo, pero con suerte”.
Señalan que Zelaya “tuvo el beneficio innegable de
recibir un país con finanzas públicas sanas y una
economía en crecimiento” aunque “por la falta
de una política económica definida no ha aprovechado
esa circunstancia para asegurar que el país continúe
su crecimiento y reducción de la pobreza de manera sostenida”.
En su opinión, el gobernante liberal también se
ha visto favorecido por la reducción de los precios internacionales
de los combustibles en un 36 por ciento, el repunte de los precios
del café en el mercado internacional y el incremento de
las remesas.
Los nacionalistas dijeron que “todos estos son factores
externos, ajenos a la actividad del Gobierno de Zelaya”,
que no tiene nada que ver “con algo que haya hecho o trate
de hacer el Gobierno liberal”, aunque reconocieron que estos
son factores que “sí le han facilitado enormemente
y han contribuido a ocultar parcialmente la improvisión
e ineficiencia de su Gobierno”.
Los nacionalistas apuntaron en su análisis que todas estas
situaciones “nos están haciendo vivir un crecimiento
virtual, un espejismo” que en su opinión no resuelve
los problemas estructurales de la sociedad y la economía
hondureña,.
Dijeron también que el primer año de Gobierno liberal
se caracterizó “por el despilfarro de los presupuestos,
por no entregar directamente a los pobres los dineros del perdón
de la deuda, por ser un pésimo ejecutor en proyectos de
inversión pública, por no actuar con transparencia
y honestidad, por ser un Gobierno anárquico y sin rumbo,
por ser un Gobierno poco serio y proclive al circo, por ser un
Gobierno sectario y no cumplir las promesas electorales”
Es un Gobierno, sostuvieron, que no ha cumplido sus promesas electorales,
“la promesa incumplida de la seguridad, de bajar la canasta
básica, de rebajar 10 lempiras al combustible, del empleo
y de la vivienda”.
El partido Unificación Democrática (UD, de izquierda)
y el Partido Innovación y Unidad Social Demócrata
(PINU-SD) también cuestionaron el primer año de
la gestión del gobernante liberal.
La diputada y ex presidenta de la UD , Doris Gutiérrez,
calificó con un cuatro (en la escala de 1 al 10) la gestión
de Zelaya, en tanto el PINU-SD señaló en un comunicado
que el actual ha sido un Gobierno caracterizado en su primer año
“por el desorden y la inestabilidad social”.
Zelaya y sus funcionarios, por su parte, no se cansan de expresar
su satisfacción por la gestión pública realizada
hasta ahora.
El
sector oficial resalta, entre sus logros, el bajo índice
de inflación registrado en 2006 (de 5,3 por ciento), la
reducción del déficit fiscal a un 1 por ciento del
Producto Interno Bruto (PIB) y la condenación de al menos
1.000 millones de dólares de la deuda de Honduras con el
Banco Interamericano de Desarrollo (BID), entre otros.
Las
fuentes oficiales apuntan entre sus éxitos el promocionado,
cuestionado e inconcluso proceso de licitación, y la reducción
del precio de los combustibles en ocho lempiras.
En
el campo educativo se muestran satisfecho por el éxito
del programa de matricula gratis y en el área tributaria
por el incremento de la recaudación fiscal en un 16,4 por
ciento.
En su informe anual al Congreso Nacional, el presidente Zelaya
dijo estar muy satisfecho porque su Gobierno logró reducir
en un 3,9 por ciento las tasas de pobreza en el país.