Jóvenes hispanos buscan mejor futuro dentro de la Patrulla Fronteriza
   

26 de febrero de 2007 

Tucson (Arizona) - Jóvenes hispanos buscan convertirse en agentes de la Patrulla Fronteriza, con la esperanza de crear un cambio a favor de sus comunidades y proteger a su país.

 

"Sé que algunas personas nos critican mucho a los hijos de inmigrantes por querer ser agentes de la Patrulla Fronteriza, sé que hay familias mexicanas que no aceptan la decisión de uno de querer aplicar para ser agente fronterizo", dijo a Efe Hugo Morales, de 22 años y residente de Tucson.

Según Morales, muchas de estas críticas surgen de historias sobre abusos por parte de patrulleros "que se creen mejor que cualquier otro ciudadano mexicano por ser agentes de inmigración".

"Mucha gente tiene la idea incorrecta sobre muchos patrulleros fronterizos porque no todos son así, pero por supuesto que de los únicos que se sabe es de aquellos que tratan mal a los mexicanos y que también son de origen mexicano o de apariencia mexicana", comentó Morales.

Hijo de inmigrantes mexicanos, Morales fue uno de los más de 250 solicitantes que acudieron este fin de semana a una feria de trabajo organizada por la Patrulla Fronteriza para reclutar nuevos agentes en la ciudad de Tucson.

Señaló que la principal razón por la que desea pertenecer a la Patrulla Fronteriza es por el alto número de drogas que cruza por la frontera, ya que él desea tener una carrera donde pueda ayudar a la gente, a su comunidad y al país.

Aunque Morales cuenta con el apoyo de su familia, ésta se encuentra preocupada por su seguridad, ya que se trata de una carrera peligrosa.

En los últimos tiempos se ha incrementado el número de ataques en contra de patrulleros en la frontera de Arizona, algunos de los cuales han sido víctimas de intentos de arrollamiento, pedradas e incluso disparos.

Pero eso no parece preocupar a Morales, que considera que con el entrenamiento correcto todo se puede hacer.

Otro joven hispano que acudió a obtener información sobre los requisitos para ser agente de la Patrulla Fronteriza fue Luis Tavares, de 20 años y originario de la ciudad fronteriza de Nogales, Arizona.

"Es una buena opción para mí. Apenas acabo de terminar la secundaria, fui aceptado en el colegio comunitario, pero quiero tener más opciones", dijo Tavares, quien hizo una cita para tomar un examen preliminar la próxima semana.

Aseguró que uno de los principales atractivos de esta profesión es el salario, que comienza con 35.000 dólares anuales y la posibilidad de viajar.

"Otra de mis opciones era la entrar al ejército, pero ni mi mamá, ni mi papá quieren. Toda mi familia está preocupada por el conflicto que actualmente hay en Irak, prefieren que sea agente de la Patrulla Fronteriza", aseguró.

Debido a que toda su vida ha vivido en una ciudad fronteriza, Taveres dijo estar acostumbrado a ver diariamente el trabajo que llevan a cabo los agentes fronterizos.

"Veo como detienen a los inmigrantes, es triste, pero alguien tiene que hacer el trabajo", sostuvo.

Por su parte, Joseph Abbott, reclutador de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), aseguró que el evento fue todo un éxito, ya que antes de que comenzara 170 personas habían hecho cita para tomar el examen de aptitudes.

"Estamos muy satisfechos con la respuesta, esperemos que todos estos solicitantes en un futuro muy cercano sean nuevos agentes de la Patrulla Fronteriza", manifestó.

Esta feria es una de las varias que se realizarán a nivel nacional para contratar a 6.000 nuevos agentes fronterizos en los próximos dos años Entre los requisitos para ser agente fronterizo está el ser ciudadano de Estados Unidos, tener menos de 40 años, una buena condición física y una licencia de conducir válida.

En el sector Tucson hay 2.500 agentes hombres y 100 mujeres. La agencia federal no lleva estadísticas por origen étnico de sus agentes porque no lo considera correcto, según dijo a Efe Gustavo Soto, portavoz de la Patrulla Fronteriza. EFE

 
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