Matan a propietario de empresa de Transportes El Rey
   

06 de marzo de 2007 
Redacción Proceso Digital

Tegucigalpa - El ex diputado y reconocido dirigente del rubro del transporte, José María Sierra Alvarenga, fue asesinado hoy por un guardia de seguridad, luego que sostuvieran un altercado en una de las empresas del hoy occiso.

 

  José María Sierra Alvarenga/Foto latribuna.hn

Sierra Alvarenga resultó con heridas de machete en diferentes partes del cuerpo, por lo que fue llevado a un centro asistencial privado, en donde falleció al filo de las siete de la noche del martes a raíz de la gravedad de las mismas.

Por el hecho fue detenido el sexagenario Santos Elvir, quien relató que el ahora occiso lo atacó y quiso agredirlo con su arma de fuego, pero él rechazó el ataque con un filoso machete.

Dijo que no recuerda cuantos machetazos le infirió al empresario y ex diputado porque estaba cegado por la ira.

Indicó que Alvarenga le reclamó porque había un carro parqueado en su propiedad y luego le asestó una patada, pero cuando éste sacaba su arma de fuego de su automóvil, él aprovechó para atacarlo "porque mi cólera fue cuando sacó la pistola".

Elvir se encuentra detenido en las celdas de la Dirección General de Investigación Criminal (DGIC), mientras se realizan las indagaciones del hecho. Por su edad, Elvir puede recibir casa por cárcel, de acuerdo al Código Procesal Penal vigente.

Hasta la clínica en donde fue internado Alvarenga, llegaron una gran cantidad de amigos, dirigentes del rubro del transporte, políticos del partido en el poder y del Partido Nacional que lamentaron el hecho.

Alvarenga era propietario de la popular empresa El Rey y Saenz, que cubre la ruta Tegucigalpa-San Pedro Sula y a través de la cual levantó un emporio económico.

El ahora occiso fue diputado propietario por el Partido Nacional en el gobierno anterior y era un beligerante dirigente del transporte, que muchas veces encabezó tirantes negociaciones por ajustes a las tarifas del transporte urbano e interurbano.

Honduras enfrenta en los últimos días una vorágine de violencia, que sólo el fin de semana cobró la vida de 36 personas. En esta ola de violencia, en las últimas 72 horas han muerto acribillados dos altos oficiales de la policía hondureña.