Caen autores intelectuales de
asesinato diputados salvadoreños
   

20 de marzo de 2007

Guatemala - Con la detención hoy de cuatro guatemaltecos por su presunta participación en los asesinatos de tres diputados salvadoreños y su chófer, las autoridades aseguran que han "avanzado" en el esclarecimiento del cuádruple crimen.

 


Los cuatro detenidos son presuntos miembros de un cártel del narcotráfico que opera en la población de Jalpatagua, en el departamento oriental de Jutiapa, fronterizo con El Salvador, y según las autoridades serían los "autores intelectuales" de los crímenes perpetrados el pasado 19 de febrero.

Mario Lémus Escobar, de 32 años de edad, alias "Yegua Arisca", y Obdulio Estuardo de León Lémus, de 30, fueron detenidos dentro de una residencia ubicada en un barrio popular del norte de la capital guatemalteca; en tanto que la captura de Carlos Amilcar Orellana, de 28 años de edad, alias el "chajazo", y de Linda Castillo Orellana, de 30 años, ocurrió en Jalpatagua.

La mujer, dijo a periodistas el ministro guatemalteco del Interior, Carlos Vielman, sería la propietaria del lujoso vehículo con el que dieron seguimiento a los diputados salvadoreños al Parlamento Centroamericano cuando ingresaron a Guatemala.

El funcionario aseguró que los detenidos "son parte de los autores intelectuales del crimen", ya que de acuerdo a las investigaciones "fueron los que compraron el combustible (con que quemaron a los salvadoreños) fueron ellos quienes desarmaron el carro de los diputados cuando estaban buscando dinero o droga".

La supuesta vinculación del narcotráfico con este crimen había sido denunciada desde hace varios días por las autoridades guatemaltecas.

Cuatro días después del crimen, los presidentes de Guatemala, Oscar Berger, y de El Salvador, Elías Antonio Saca, dijeron en México que creían que el narcotráfico estaba detrás de los crímenes.

Berger sostuvo que los cuatro policías guatemaltecos detenidos el 22 de febrero acusados de la matanza "esperaban un traslado de droga o de dinero", pero que "equivocadamente o lastimosamente procedieron en contra de los dignos diputados salvadoreños y su chófer".

En tanto que el director de la Policía Nacional Civil (PNC) de Guatemala, Erwin Sperisen, dijo a la prensa el pasado 9 de marzo que narcotraficantes guatemaltecos serían los autores intelectuales de los asesinatos de los políticos.

Los cuerpos calcinados de los legisladores Eduardo D'Aubuisson, José Ramón González y William Pichinte, junto con Gerardo Napoleón Ramírez, un policía que les servía de chófer, fueron encontrados el pasado 19 de febrero en una apartada región de la carretera que de la capital guatemalteca conduce a El Salvador.

Los cuatro policías guatemaltecos acusado de ser los autores materiales de la matanza, fueron asesinados el 25 de febrero en el interior de la cárcel de máxima seguridad de "El Boquerón", donde fueron recluidos.

Un quinto agente de la policía, Marvin Contreras Natareno, también señalado de haber participado en el crimen, se entregó de forma voluntaria el 28 de febrero, y el pasado viernes admitió la participación de los policías asesinados en la matanza de los diputados.

Otro agente, identificado como Jeiner Barillas, quien sería el supuesto enlace entre el grupo de narcotraficantes de Jalpatagua y los policías asesinados, y que según Vielman "es el jefe de los sicarios", se encuentra prófugo de la justicia.

El presidente salvadoreño ha negado la participación de los diputados en el narcotráfico y ayer reiteró en Guatemala que no existe ninguna investigación abierta sobre ellos porque "eran gente honesta, trabajadora y que básicamente fueron atacados por los policías guatemaltecos".

Saca afirmó que los diputados fueron "secuestrados y llevados inmediatamente a este lugar donde les quitaron la vida", y recalcó que evidentemente estructuras de poder en Guatemala tienen que ver con la muerte. EFE