Comunidad negra conmemora
210 años de su llegada a Honduras

 

11 de abril de 2007

Tegucigalpa - La comunidad afroamericana de Honduras conmemorará este jueves los 210 años de la llegada de los primeros negros a este país, con una serie de actividades cívicas y culturales a las que asistirán altas autoridades del Gobierno.


El canciller hondureño, Milton Jiménez, dijo a Acan-Efe que a los actos conmemorativos que se celebrarán en las comunidades de El Triunfo de la Cruz y La Ceiba, en el departamento caribeño de Atlántida, asistirá el presidente de la República, Manuel Zelaya.

El diplomático aclaró que no es cierto que a La Ceiba asistirán el resto de los presidentes de Centroamérica, como ha venido anunciando la Organización de Desarrollo Étnico Comunitario (ODECO) y la misma Casa Presidencial en su página electrónica.

Añadió que en efecto, la ODECO invitó a los gobernantes de los países miembros del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) para que asistieran a los actos de mañana en La Ceiba, pero que los presidentes no vendrán por problemas con sus agendas de trabajo.

"Solamente estará el presidente Zelaya", subrayó Jiménez, quien al igual que otros altos funcionarios del Gobierno hondureño asistirá a la conmemoración de la llegada de los "garífunas" (negros) a Honduras.

Las actividades para recordar la llegada de los primeros negros al país iniciaron el pasado 1 de abril y concluirán el día 30 de este mismo mes, indicó el presidente de la ODECO, Céleo Alvarez.

El calendario de actividades incluye charlas en materia de educación, salud, discriminación racial, conferencias sobre la comunidad "garífuna" y sus primeros descendientes, exposiciones de arte, gastronomía, el aporte cultural de raza negra al país, festivales de música y carnavales, entre otras actividades.

Los primeros negros llegaron a Honduras el 12 de abril de 1797, como esclavos, procedentes de la isla de San Vicente, según apuntes históricos.

Desembarcaron en el sector de Punta Gorda, en la paradisíaca isla de Roatán, de donde después llegaron a tierra firme y se dispersaron por toda la región costera en el Caribe de Honduras, que tiene una extensión de unos 700 kilómetros, desde la frontera con Guatemala hasta los límites con Nicaragua.

La población negra de Honduras representa el 10 por ciento de los siete millones de habitantes que tiene el país. EFE