Maradona,
que había abandonado el sanatorio Güemes de la capital
argentina el miércoles pasado después de estar dos
semanas ingresado a consecuencia de una hepatitis aguda tóxica,
sufrió esta madrugada una nueva recaída y fue trasladado
en ambulancia al Hospital Madre Teresa de Calcuta de Ezeiza (30
kilómetros al sur de Buenos Aires), donde permanece en la
sala de Terapia Intensiva.
El
ex futbolista ingresó al hospital acompañado por su
médico personal, Alfredo Cahe, quien está a la espera
de los resultados de una ecografía practicada a Maradona
para descartar un problema agudo, como una pancreatitis.
Maradona
ingresó en el centro hospitalario sobre a las 4.45 horas
local (7.45 GMT) al sufrir fuertes dolores abdominales y una vez
alojado en la unidad de cuidados intensivos, a petición del
doctor Cahe, fue sedado.
Cahe,
quien prometió ofrecer una rueda de prensa en breve, está
reunido con las autoridades del hospital de Ezeiza para decidir
el traslado al ex deportista a un sanatorio de la capital argentina.
En
declaraciones a una radio local, Cahe dijo que Maradona "está
compensado" y que planea llevar al paciente a la clínica
Los Arcos de Buenos Aires.
El
médico reiteró que no estuvo de acuerdo con que el
ex futbolista abandonara este miércoles el sanatorio Güemes,
aunque indicó que "se le dio el alta porque los exámenes
que le hicieron daban resultados normales".
 |
Comentó
que todavía faltaban realizarle a Maradona "algunos
estudios complementarios, como un examen cerebral".
Tras
ser dado de alta el miércoles último, Maradona
se había mudado a una finca a las afueras de Buenos
Aires.
|
El
ex futbolista sufre de una afección hepática crónica
y hace dos semanas había sido ingresado de urgencia en el
Güemes por un cuadro de intoxicación por consumo de
alcohol. EFE
|