25
de junio de 2007
Tegucigalpa - La llamada "emergencia" energética decretada por el gobierno de Manuel Zelaya para justificar la compra de energía eléctrica térmica cara, solo es la conclusión de una administración caracterizada por la improvisación, sino el desorden, ya que en dicho periodo jamás pudo tener a un responsable por más de tres meses en la empresa estatal de electricidad. El caso es que el gobierno se apresta en este momento a autorizar uno de los contratos de generación de energía térmica mas polémico, oneroso y cuestionado, desde que el Estado hondureño inicio en la década de los noventas la contratación de electricidad con plantas térmicas. Con esta decisión, Zelaya prácticamente falta a su palabra, su promesa de campaña y de toma de posesión, en donde se comprometió a poner fin a las oscuras contrataciones de energía generada en base a combustibles y establecer una política energética dirigida al desarrollo de proyectos hidroeléctricos. Recientemente, el Ejecutivo firmó un acuerdo para comprar 20 megavatios a la compañía Nacional de Ingenieros, de los mismos propietarios del Coliseum Nacional de Ingenieros, el recinto que fue utilizado por “Mel” Zelaya en forma "gratuita" para realizar sus encuentros en periodo electoral, a un costo de 19 centavos de dólar por kilovatio, el más caro de todos los firmados en los últimos años.
Los
precios de la compra De los seis principales contratos de compra de electricidad suscritos por el estado de Honduras, los logrados por la administración del ex presidente nacionalista Ricardo Maduro han sido los más ventajosos para la ENEE en términos de costo por kilovatio y el tiempo de vigencia de los mismos. En ese momento se adquirieron 410 megavatios a 0.08 centavos de dólar el kilovatio y a 12 años plazo, igualmente fueron los cargos fijos aplicados los más bajos de los otros cuatro contratos de compra. El contrato más caro fue adquirido durante la administración del ex mandatario liberal Carlos Roberto Reina el llamado Lufussa 1 a 17 centavos de dólar el kilovatio, comprandose 39.5 megavatios a 15 años plazo. El primer contrato suscrito con Elcosa durante el gobierno del ex presidente Rafael Leonardo Callejas, en 1993, fue adquirido a 16 centavos de dólar por 15 años con un total de 80 megavatios. Durante el gobierno liberal de de Carlos Flores se firmaron, en 1998, dos contratos, Lufussa II de 77 megas y EMCE Choloma de 55 megas a 11 centavos de dólar el kilovatio a 20 años plazo. Los precios vigentes con las generadoras
¿Crisis
o negocios?
Prueba de que no hay problemas de producción es que Honduras vende hasta 20 megavatios de electricidad a Costa Rica en horas nocturnas, cuando el consumo se reduce a la mitad, aproximadamente unos 600 megavatios. La demanda es de unos 1,050 megavatios, mientras que la producción oscila en unos 1,100 megavatios. Es conocida que la capacidad de producción de las empresas térmicas no es del 100 por ciento, de manera que tienen capacidad de generar más electricidad. Esa "pérdida técnica" es lo que ha provocado que la ENEE genere pérdidas financieras por el monto de 3,000 millones de lempiras anuales, según lo ha denunciado el presidente Zelaya y suslugartenientes. Eso justamente es lo que ha llevado al Fondo Monetario Internacional (FMI) y demás organismos internacionales a pedir al gobierno a que mejore las condiciones financieras de la ENEE como condición para la firma de un acuerdo.
Giro
en política Esa empresa constructora, ahora metida a la generación de electricidad, logró un contrato de 20 megavatios de energía en la ciudad de La Ceiba a un precio de 13. 2 centavos de dólar, sin embargo, el sindicato de la Enee , denunció que el precio es de 19 centavos de dólar, a un plazo de 10 años. Pero paralelo a eso el gobierno anunció también la adquisición de 350 kilovatios, casi a los mismos precios del anterior. En esta precipitada acción se estableció que el combustible sería proporcionado por el Gobierno, actualmente el precio del barril a nivel internacional se encuentra a 52 dólares.
La semana anterior, trascendió en un medio escrito, una carta en la que el presidente desautorizaba a Bendeck seguir hablando de la contratación de energía térmica y que al final fue el detonante para la salida del ahora ex funcionario. Muchos sectores económicos y políticos opinan que la compra de energía que se apresta a hacer el gobierno a precios tan altos, puede ser el “tiro de gracia” del gobierno liberal a la quebrada y casi agonizante ENEE. |
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