25 de julio de 2007
Redacción Proceso Digital

  • Una fuente eclesial reveló que el prelado se mostró sorprendido y dolido por el debate que ha generado

Tegucigalpa. El cardenal Oscar Andrés Rodríguez pidió a la iglesia poner punto final a la polémica que provocaron las ofensas vertidas en su contra por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, y se mostró “sorprendido y dolido” por el debate que esto generó anoche en el Congreso Nacional, reveló una fuente eclesial.

“Yo quiero insistir en la postura que el señor cardenal nos ha pedido, que oficialmente se tome claro esto: No vamos a reaccionar a estas palabras del señor presidente de Venezuela, no se le va a contestar, no se le va exigir nada”, enfatizó hoy a Radiocadena Voces el portavoz de la iglesia católica, Juan Ángel López

Lamentó que las declaraciones de cardenal se estén saliendo fuera de tono o tomando en otro contexto, ya que en ningún momento el purpurado quiso referirse en términos despectivos o peyorativos al presidente Chávez, sino que lo estaba invitando a aceptar la crítica, a escuchar voces disonantes que no piensan como él.

“El señor cardenal estaba dando un consejo…. pero él no está insultando, no está ofendiendo, él no se está refiriendo con términos despectivos o peyorativos a una figura como el presidente de Venezuela, sino que con mucha caridad y amor al pueblo de Venezuela en primer lugar, que es la preocupación última que tiene la iglesia y que tiene el cardenal”, dijo.

López defendió la figura del purpurado hondureño y dijo que nadie puede cuestionar su amor y preocupación permanente por Latinoamérica y por los pobres del continente.

“Yo creo que ninguno de nosotros, ni nadie en Latinoamérica con tres deditos de frente va a cuestionar el amor que tiene el cardenal por América Latina y las luchas que ha esgrimido a favor de la gente más pobre del continente, es un latinoamericanista de primera, es de los pocos latinoamericanistas coherentes que existe”, apuntó.

Por otro lado, señaló que el cardenal Rodríguez resultó “sorprendido y dolido” por lo suscitado la noche del martes en el Congreso Nacional, cuando la presidenta Lizzi Flores aprobó una moción de la bancada nacionalista que pide al presidente Zelaya solicitar a su homólogo venezolano se disculpe con Honduras y con él por sus declaraciones.

El sacerdote reiteró que de parte del prelado hondureño no habrá por los momentos ninguna reacción sobre lo expresado por Chávez y posiblemente lo hará cuando las “aguas hayan vuelto a su cauce”, pero no en el mismo nivel.

“A mi particularmente me lo dijo, cada vez que yo le dije eminencia me llamaron y me pidieron una opinión de tal medio, él me dijo: Mijito eso ya no, o sea no vale la pena. Esas fueron sus palabras y yo estoy cumpliendo esas órdenes”.

Finalmente, López indicó que el Vaticano ni el Nuncio Apostólico, Antonio Arcari, aún no se han pronunciado al respecto y no cree que lo hagan porque la intención es respetar la voluntad del cardenal.

 
Enviar
Imprimir
Comentar


 

 
Todos los derechos reservados PROCESO.HN ® Copyright 2005