En
apenas dos horas, la capital fue el escenario de dos atentados
en zonas populares que acabaron con la vida de más de
30 personas, según explicaron a EFE fuentes policiales.
Nueve
iraquíes murieron y otros diez resultaron heridos por
la explosión de un artefacto en un establecimiento del
barrio Nuevo Bagdad, en el sur de la capital.
La
bomba explotó pasadas las 21.00 horas locales (17.00
GMT) en un horno de pan situado en la calle Al Masbah del citado
barrio.
Poco
antes, a las 19.50 horas locales (15.50 GMT), un coche bomba,
probablemente activado por control remoto, acabó con
la vida de 22 personas e hirió a 58 más.
Esta
explosión ocurrió en un mercado popular del barrio
de Al Huseiniya, en el noreste de Bagdad, donde la Policía
iraquí consiguió desactivar otro automóvil
cargado de explosivos.
Los
atentados de la tarde en Bagdad fueron perpetrados poco después
de que un terrorista suicida al volante de un coche cargado
de explosivos matase a doce personas e hiriera a otras 32 en
la localidad de Hillah, al sur de la capital.
El
suicida hizo estallar la carga alrededor de las 18.00 horas
locales (14.00 GMT), cerca de un concesionario de coches en
el barrio Nader.
Además,
ataques de grupos de hombres armados acabaron con la vida de
nueve personas, tres de ellas pertenecientes a las fuerzas de
seguridad, en Bagdad y la provincia de Diala, informaron fuentes
de seguridad locales.
En
el peor incidente dos empleados perdieron la vida y cuatro policías
resultaron heridos esta mañana al estallar varios proyectiles
de mortero que impactaron en la tercera planta del Ministerio
del Interior de la capital iraquí, precisaron las fuentes.
Asimismo,
revelaron que encontraron en las proximidades del ministerio
el coche desde el que desconocidos lanzaron las bombas de mortero,
una de las cuales cayó en las inmediaciones de una escuela,
aunque no causó víctimas. EFE