Un
portavoz de la Policía Nacional Civil (PCN) dijo a Acan-Efe
que el hecho ocurrió el viernes en la colonia Villa Tzuchi,
situada a inmediaciones de la carretera que comunica a las ciudades
de Quezaltepeque y San Juan Opico, en el departamento central
de La Libertad.
Las
víctimas fueron identificadas como Nora Edelfira Guevara
Martìnez, de 46 años; su hija Jenny Arely Martínez
Guevara, de 14, y José Mauricio Gil Mejía, de 52
años.
Los
cuerpos de las víctimas presentaban heridas de bala en
distintas partes del cuerpo.
Además
de los tres fallecidos, en la casa se encontraban otra adolescente,
un niño de diez años y otro de cuatro.
Según
los informes, varios hombres con los cuerpos tatuados, supuestos
pandilleros, llegaron a la vivienda, propiedad de Nora, quien
se dedicaba a la venta de tortillas de maíz, y tras gritar
que se trataba de un asalto procedieron a encerrar al niño
de diez años en un cuarto.
A
la otra adolescente, no identificada, le golpearon en la cabeza
por lo que quedó inconsciente, mientras que frente al niño
de cuatro años procedieron a disparar contra las víctimas
mortales.
El
hombre fallecido trabajaba como soldador y había llegado
a la vivienda contratado para reparar el techo.
Este
triple asesinato ocurrió pocas horas después de
que tres hermanos corrieran el viernes igual suerte en la misma
zona.
José
Luis, Víctor Manuel y Oswaldo de Paz, de 21, 20 y 28 años,
respectivamente, fueron asesinados en el kilómetro 27 de
la carretera del volcán, en Quezaltepeque.
Las
víctimas fueron encontradas por vecinos del lugar poco
después de ocurrido el crimen, cometido con armas de fuego
y cortantes.
Según
los informes, los hermanos de Paz se dedicaban a las labores agrícolas
y fueron sorprendidos por los atacantes cuando se trasladaban
a pie hacia el campo. EFE
