El
cadáver calcinado de Renato Zúñiga, de 26
años, fue encontrado en el sector de Siguatepeque, ciudad
central de Honduras, según informó el subcomisario
de policía Javier Flores en El Progreso, norte del país.
El
ahora asesinado y el chofer Ángel Guerrero estaban con
el niño Daniel Alfredo Márquez cuando el martes
fue secuestrado a la salida del colegio en la ciudad norteña
de Yoro.
El
vehículo en el que viajaban los adultos y el niño
fue interceptado por otro ocupado por al menos cuatro hombres
armados, que se los llevaron a los tres y minutos después
se comunicaron con el padre del niño, Catalino Márquez,
para informarle del secuestro, según confirmó el
empresario a la prensa.
El
padre del menor es propietario de un hotel y otros negocios en
Yoro, cabecera del departamento del mismo nombre, unos 308 kilómetros
al norte de Tegucigalpa.
La
Policía investiga a tres hombres armados que fueron detenidos
el martes a bordo de una camioneta de lujo en una carretera cercana
a El Progreso, también en Yoro, por su posible vinculación
con el secuestro del niño.
Un
cuarto ocupante de la camioneta se fugó, dijo un portavoz
policial a la prensa.
Los
secuestros registrados en Honduras entre 2006 y este año
suman una veintena, según medios locales de prensa y la
Policía. EFE
